Jihane Jedidi, optica/periodista, directora de Comunidad infomarruecos
A mi amiga y cliente Rhama no parece afectarle la carestía de algunos productos básicos para la ruptura del ayuno durante el sagrado mes.
Para mi todo puede resultar optimo si se hace una buena gestión de la situación y de la circunstancia, me dijo sin dejar de desaprobar el disparo de muchos productos “en vísperas de tan importante mes para los marroquíes”.
Rahman afirma sin dar más detalles de que “siempre hay todo a la medida del bolsillo”, alusión al saber-hacer cuando se va de compra y cuando se preparan los platos.
No obstante, la mujer se queja;, con su habitual calma, de que “algunos productos son, este año inaccesible”. No precisa cuáles son, pero, precisa en cambio que “en Ramadán o en otros meses nada es insustituible”.
Rahma cree que “se debe imaginaria para poder mantener el mismo nivel y la misma cantidad con menos o, como es el actual caso, con mucho menos”.
Una imaginación desbordante que contagia optimismo. A cada problema, una solución, cuando no, dos.
