Al Hawz/Terremoto: Los bulos, la peor pandemia de la etapa

Hay un refrán tradicional marroquí que doce “cuando el lobo no alcanzo el racismo de las uvas, dijo que es amargo”.

Lo traemos a colación porque, muchos países propusieron a Marruecos su “ayuda” en las actuales operaciones de socorro en Al Hawz y en las zonas donde el terremoto del viernes que causo enormes estragos. Ninguno, salvo la junta militar argelina ha reaccionado con histeria a la negativa marroquí. Incluso Francia, a través de su presidente lo ha dejado claro: la aceptación o no de esta ayuda es cuestión de soberanía nacional marroquí.

Ayudan los amigos… nunca los enemigos, menos aun los visceralmente anti-marroquíes.

Serena y educadamente, sin revelar que las imágenes que difundían eran de equipos de socorro para Libia y no Marruecos. ¡Colmo de indecencia!

Luego amenazaba con “medidas aprobadas” … Con ello el régimen delincuente se refería al ciber-crimen. Dicho y hecho. No solo con sus subdesarrollados medios informativos, sino con los ingresos de su petróleo y gas para corromper a quien estaba autorizado a entrar a Marruecos.

Finalmente… accidente de un helicóptero en el perímetro de la provincia de Azilal, ni niño rescatado vivo de entre los escombros por socorristas españoles, ni rescatistas españoles salvaron a un niño enterrado bajo los escombros en una localidad afectada por el desastre, según un vídeo compartido en las redes sociales ni Qatar envía los contenedores del Mundial para albergar a los afectados ni ha enviado cabañas y contenedores dedicados a alojar a los aficionados durante el Mundial de 2022 para albergar a las víctimas del terremoto de Al Haouz, según vídeos y montajes que circulan en las redes sociales

Las procesiones de contenedores y cabañas que aparecen en los vídeos en cuestión habían sido transportadas por Qatar a Turquía para albergar a las víctimas del terremoto ocurrido el pasado mes de febrero en el sureste del país ni aldeas que no han recibido ayuda hasta ahora…

Ni… ni…ni

¿Y Marruecos? Tranquilo… sereno, como diría el difunto rey Hassan II: “No queremos que nos apoyen en nuestra integridad territorial, sino que sepan qué tipo de vecinos con que estamos castigados”.

Otra estrategia de desestabilización y otro fracaso. Marruecos trabaja para paliar el sufrimiento de sus hijos víctimas de la catástrofe natural pero tiene un ojo sobre los canallas.