Desde 1994 las fronteras entre Argelia y Marruecos están cerradas, a cal y canto,
A quién ha beneficiado y a quién ha perjudicado?
Said Jedidi es periodista y escritor. Director de ingfomarruecos.ma y de conacebntomarroqui.blogspot y embajador de la Paz por el Circulo Universal de Embajadores de la Paz (Suecia/Francia)
En principio y de conformidad con la idiosincrasia marroquí ninguna ruptura es beneficiosa.
No obstante, cuando la ruptura se caracteriza por una prohibición del cielo para vuelos civiles y militares, cierre de la frontera y… el claro objetivo es tratar de desestabilizar a la diana y al vil blanco que es Marruecos.
¡A ver! ¿Qué ha dado a la junta militar argelina esta mal calculada peor ejecutada ruptura y sus posteriores atentados contra los intereses estratégicos de Marruecos?
Marruecos nunca ha sido mejor, tanto que se diría que otros países sienten una fuerte tentación de seguir a Marruecos en esta ruptura.
Sin embargo, la intensificación del apadrinamiento de la milicia del Polisario para desestabilizar al vecino marroquí, no ha seducido a la víctima marroquí de aprovechar, como lo ha el régimen delincuente argelino, las tendencias separatistas cada vez más activas y cada vez más insistentes dentro de Argelia.
El separatismo y la desestabilización son cultura exclusivamente argelina.
De hecho, Marruecos ni siquiera ha respondido a las inútiles medidas argelinas, consciente de que en ello estriba la diferencia entre unos y otros.
Casi 49 años de infructuosa empresa desestabilizadora contra Marruecos con una milicia oxidada, inútil y horriblemente costosa.
Todo porque la junta militar argelina se ha dado cuenta de su mortal error. Otra cosa es reconocerlo de manera explícita.