Tinduf: niños soldados entrenados por el ejército argelino, cuyo presidente "vela" por la paz y la estabilidad regionales
Aclaro, de antemano que importa muy poco cómo me llamo, ni dedonde soy ni como he llegado hasta aquí, sino lo que voy a revelar, porque a excepción de una sola hermana, internada hace 11 meses en un hospital de Nuakchot, antes de decidir regresar a su país: Marruecos, toda mi familia (15 miembros entre próximos y lejanos parientes) sigue, como la inmensa mayoría de su población, rehén del Polisario en los campamentos de Tinduf pero esto no lo sabrán a través de España y sus laberintos de “derechos humanos” y de “solidaridad’ internacional… preferente y casi exclusivamente con una ínfima parte de los saharauis.
Queda el sentido común y el sentido común exige que se abra los ojos y distinguir entre los Estados y milicias, entre la realidad y la ficción y entre la verdad y la impostura.
48 anos casi 40 años con la misma canción, las mismas mentiras y el mismo caos. Antes de Estados Unidos, el Sahara era marroquí. Antes de España, el Sahara era marroquí. Antes de Argelia, el Sahara era marroquí. El Sahara fue/es/será marroquí. En esta horquilla se puede encontrar una solución a un prefabricado problema que no hace más que causar daño a todos. Imposible de imponer una milicia total extranjera en la historia, en las relaciones humanas y en la realidad de una región que todo el mundo sabe que Se trata de cinco países ni uno más ni uno menos. Así fue y así va a ser. Lo demás es simple alucinación hegemonista de un sueño expansionista imposible.
Lo real y realista y lo irreal e imposible. Casi medio siglo de infructuosas tentativas a expensas de la integración regional, de la convivencia y de la fructífera cooperación. Otro medio siglo, otro siglo y otros siglos. La impostura nunca será realidad. Hoy como ayer y como siempre la autosugestión no será más que lo que fue durante este medio siglo.
Marruecos está en su Sahara y su Sahara está en su Marruecos. LO demás es sueno perverso sin día siguiente. Así fue y asi no debe continuar.