Entre ciber-delincuencia y las esposas de los "delegados" el Polisario dilapida el 75 hasta el 80% de la ayuda humanitaria internacional
Aclaro, de antemano que importa muy poco cómo me llamo, ni dedonde soy ni como he llegado hasta aquí, sino lo que voy a revelar, porque a excepción de una sola hermana, internada hace 11 meses en un hospital de Nuakchot, antes de decidir regresar a su país: Marruecos, toda mi familia (15 miembros entre próximos y lejanos parientes) sigue, como la inmensa mayoría de su población, rehén del Polisario en los campamentos de Tinduf pero esto no lo sabrán a través de España y sus laberintos de “derechos humanos” y de “solidaridad’ internacional… preferente y casi exclusivamente con una ínfima parte de los saharauis.
El Polisario sabe que no pocos dirigentes argelinos comienzan a exigir una “profunda revisión” de las relaciones de su país con su milicia del, Polisario.
Como dicen nuestros hermanos egipcios, “la puerta de la que entra una corriente, ciérrala y quédate tranquilo”.
En Argelia no todo el mundo es miope. Los hay que piensan en los intereses supremos de su país, en los que no figura dilapidar los fondos del contribuyente argelino en una inútil y costosa milicia.
Será hoy o mañana, pero irremediablemente. No se puede ir contra la corriente de manera indefinida. Los hechos y los balances están allí. ¿Qué es lo que ganado o perdido Argelia con el Polisario? ¿Qué objetivo político, geopolítico o estratégico se ha podido realizar en casi medio siglo de predicción en el desierto (Sahara)?
Un día u otro se despierta y, despertándose se descubrirá el monumental error a todos los niveles de mantener una milicia que en 49 anos no ha servido para absolutamente nada y que cuesta el ojo de la cara a los argelinos, además de frenar drásticamente el progreso y el desarrollo del país.
Se equivocan los que creen que puede ocurrir el milagro y se equivocan los que no creen erróneamente que no son tiempos de milicias.