Jihane Jedidi es optica/periodista directora de comunidad infomarruecos
Foto: Jedidi Media
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En Marruecos como en muchos otros países, la edad de oro de los servicios a domicilio, incluidos de restaurantes fue un imperativo impuesto por dos largos años de pandemia.
Ahora estamos mejor. La gente puede salir, viajar, ir de compras o a restaurantes y encontrar a otra gente. La amenaza es considerablemente menos que antes y la gente o està obligada a aceptar lo que sea.
Ante esta nueva y lógicamente prevista “convulsión”, los servicios a domicilio, debían y no lo comprendieron así, reconvertir su metodología para conservar a sus clientes.
Conozco a muchas familias que, ante la muy a menudo, pésima calidad de los productos pedidos, prescindieron de los servicios a domicilio.
Uno de mis clientes que trabaja en este dominio me contó que los servicios a domicilio han bajado mucho.
Y no es porque la gente se atreve a salir de compras, sino porque la mayoría de estos servicios aportan productos de una mala calidad.
El comercio tiene reglas… el comportamiento también.
