Los participantes en la Conferencia Parlamentaria sobre el Diálogo Interreligioso hicieron el jueves en Marrakech un llamamiento a la coexistencia basada en la igualdad y la dignidad para todos.
En la « Declaración de Marrakech », emitida al término de este gran evento bajo el Alto Patrocinio de Su Majestad el Rey Mohammed VI, subrayaron la necesidad de crear grupos o comisiones parlamentarias en los parlamentos nacionales sobre el diálogo interreligioso e intercultural para la coexistencia pacífica y la inclusión social, y de promover la cooperación entre estos grupos o comisiones.
También pidieron que se anime a los líderes de las comunidades religiosas y de creencias a promover la inclusión, los derechos fundamentales y la igualdad de género dentro de sus comunidades, de acuerdo con la legislación nacional y los compromisos internacionales.
Los participantes también subrayaron la importancia de promover una mayor cooperación entre los representantes de las religiones y creencias y las autoridades nacionales en la lucha contra delitos como la trata de seres humanos, la servidumbre doméstica, la violencia doméstica y el trabajo forzoso, y la protección de las víctimas de estos delitos.
Para ello, pidieron la participación de los representantes de las religiones y creencias, y de las organizaciones confesionales junto con los representantes de la sociedad civil, teniendo en cuenta la diversidad, en los esfuerzos en curso para garantizar la aplicación de las leyes nacionales y los compromisos internacionales y la promoción de la cohesión social.
Firmemente convencidos de la necesidad de establecer un contrato social que refuerce la dignidad común, la fraternidad y la igualdad entre todas las personas, y de construir sociedades resilientes en las que todos puedan encontrar su lugar, pidieron que se fomente la cultura del diálogo en los parlamentos como herramienta esencial para la paz y la inclusión. Map
