El Encanto de "Ojalá":
Un Rastro Lingüístico de Nuestro Pasado Común
En el rico mosaico de la lengua española, una palabra destaca por su singularidad y su historia fascinante: « ojalá ». A primera vista, parece una interjección simple, pero si excavamos un poco más, descubrimos que esta pequeña palabra lleva consigo un legado cultural que une las costas de Marruecos con las de España, un recordatorio de nuestro pasado compartido y de cómo las lenguas pueden ser puentes entre culturas.
La palabra « ojalá » se utiliza para expresar un profundo deseo de que algo suceda o se cumpla. Sin embargo, su origen se remonta al árabe hispánico, específicamente a la expresión « law šá lláh« , que se traduce como « si Dios quiere » o « quiera Dios » وإن شاء الله. Esta raíz es un eco de la influencia islámica en la península ibérica durante siglos de convivencia, un período en el que las lenguas y las culturas se entrelazaron de manera única.
El árabe hispánico dejó una marca indeleble en la lengua española, aportando un tesoro de palabras como « alfombra », « aceituna » albóndiga » y “alférez”, que son testimonios de esta herencia compartida. « Ojalá » es otro ejemplo de este legado, una palabra que recuerda cómo las lenguas pueden converger y enriquecerse mutuamente a lo largo de la historia.
En su forma original, « ojalá » llevaba consigo una fuerte connotación religiosa, haciendo referencia a la voluntad de Alá, el Dios de los musulmanes. A medida que el español evolucionaba, esta connotación religiosa se desvanecía, y la palabra se convertía en un medio para expresar deseos y esperanzas en la vida cotidiana.
La evolución de « ojalá » hacia su forma actual, con la letra « j » en lugar de la « x » (oxala), nos recuerda cómo las lenguas cambian y se adaptan con el tiempo. Fue en la edición de 1817 del diccionario de la Real Academia Española cuando « ojalá » se estableció oficialmente con su ortografía actual y el mismo significado que había sido registrado en el « Diccionario de Autoridades » en 1737.
Hoy en día, « ojalá » es una palabra que todos los hispanohablantes conocen y utilizan para expresar sus deseos y esperanzas en la vida. Esta palabra es un ejemplo de cómo las lenguas pueden cruzar fronteras y unir a las personas a través del tiempo y el espacio.