Campamentos argelinos de Tinduf: un obstáculo a la paz y a la estabilidad
Mi identidad no importa, solo mi mensaje. Mi hermana ha vuelto a Marruecos tras meses de hospitalización en Nuakchot, pero el resto de mi familia sigue en los campamentos del Polisario en Tinduf, olvidados por la “solidaridad” internacional y los “derechos humanos”.
Retomando nuestra discusión sobre las tácticas del Polisario, nos encontramos con un silencio persistente después de los incidentes en Es-Smara. ¿Es este un dorado silencio estratégico o simplemente una pausa momentánea en su peculiar juego diplomático?
Después de los actos de violencia que afectaron Es-Smara y las subsiguientes deliberaciones del Consejo de Seguridad de la ONU, el Polisario ha optado por la reticencia, una táctica que, hasta ahora, nos deja más preguntas que respuestas.
Tras los ataques terroristas en Es-Smara, la Resolución 2703 reafirmó el compromiso de la ONU con la solución de autonomía propuesta por Marruecos, dejando al Polisario en una posición delicada. En lugar de responder a las acusaciones y enfrentar las consecuencias diplomáticas, han decidido adoptar una suerte de « huelga de palabras ».
Las acciones subsecuentes del Polisario, o más bien la falta de ellas, han sido igualmente desconcertantes. Nuevos incidentes en Es-Smara el 5 de noviembre sugieren que el grupo separatista está lejos de abandonar su agenda, pero su silencio persistente ante tales eventos plantea interrogantes sobre su estrategia futura.
Es particularmente intrigante el hecho de que esta pausa comunicativa coincida con reuniones adicionales entre líderes del Polisario y la supervisión atenta de Argelia. ¿Están orquestando una estrategia más elaborada o simplemente reevaluando sus tácticas tras el revés de la Resolución 2703?
El Polisario parece haber elegido la estrategia del silencio en un momento crucial. En un mundo donde la diplomacia y el diálogo son cruciales, el silencio puede ser una herramienta poderosa o una táctica riesgosa. ¿Es esta una elección calculada para generar expectación o un reconocimiento tácito de que su juego diplomático está perdiendo fuerza?
La incertidumbre persiste en medio de este misterioso silencio. ¿Es el Polisario el arquitecto maestro de una nueva estrategia, o están, como se sugiere, ocupados buscando un manual para reinventarse? En el próximo capítulo de esta saga diplomática, esperamos desentrañar los secretos detrás del enigmático silencio del Polisario y entender si esta táctica de palabras calladas los llevará a un nuevo capítulo de relevancia o a un callejón sin salida diplomático.
