Jihane Jedidi es optica y especialista de temas de sociedad
Una fuerte polémica, desde el jefe del gobierno hasta el Parlamento hasta pasando por la prensa e incluso algunos médicos, desconcierta a los marroquíes.
El pretexto que se esgrime es la “insuficiente” remuneración en Marruecos.
Nada es más inexacto. Es un problema de principios éticos y morales, de autenticidad y de originalidad. En una palabra: de nacionalismo en el sentido de que la medicina antes de los fines lucrativos es humanismo, es moralidad, es amor al prójimo.
Les voy a dar un ejemplo: Cuba. Una potencia que “produce” y “exporta” médicos. El sueldo de un médico especialista en Cuba equivale a la escala 7 en la administración publica en Marruecos. Solo que ningún médico cubano ha emigrado en busca de más ingresos o de mejor situación.
De hecho, a excepción de los marroquíes formados en algunos países extranjeros, ningún médico o, incluso enfermera/ros marroquíes en el extranjero hizo fortuna ni reputación.
Nos quedan muchos médicos y vamos a tener muchos más, pero, desde ahora se debe incluir una materia de la noble misión del médico en los estudios de medicina.