Las elecciones son asunto hispano-español, las urnas reflejan la voluntad popular y nadie absolutamente nadie tiene derecho de inmiscuirse en el curso electoral, ni antes, ni durante ni después
Said Jedidi es periodista y escritor, embajador de la paz por el Circulo Universal de Embajadores de la Paz y presidente nacional (Marruecos) de la Asociacipn mundial de escritores en español
Un refrán chino dice que hasta la ingenuidad tiene límites. Es decir: que superar estos limites se convierte en delincuencia o, cuando menos, complicidad.
Sacamos a colación este proverbio por el impresionante y escandaloso numero de fakes news sobre Marruecos en relación a las elecciones en España y respecto a lo cual tomarlo en serio seria o bien desmesurada e intencionadamente ingenuo o cómplice.
Me explico: Marruecos lo ha dicho y reiterado desde siempre para con España y para con el resto de los países del mundo: las elecciones son asunto hispano-español, las urnas reflejan la voluntad popular y nadie absolutamente nadie tiene derecho de inmiscuirse en el curso electoral, ni antes, ni durante ni después ni en Marruecos ni en España ni en ninguna parte del mundo. El Reino se limita a respetar, avalar y aceptar el veredicto de las urnas.
Es una cultura y una constante políticas.
Dicho esto, se debe preguntar ¿Quién emprende estas empresas (en plural) calumniosas contra Marruecos en España? ¿españoles? No. ¡Ni hablar! Si consideramos las quintas columnas de otra obediencia.
Ningún español normal, honesto y responsable consagraría su tiempo y su esfuerzo a difamar a un país con el que no tiene no haya tenido ninguna divergencia. Los que lo hacen con una viciosa asiduidad cobran por ello y tampoco se debe extralimitar la ingenuidad para preguntar de quién, como y porqué.
En Marruecos, afortunadamente no tenemos esta especia ni la necesitamos porque pensamos en voz alta. Compramos muchas, cosa, como dijo el difunto Hassan II, muchas, menos las conciencias que es cultura y practica de otros.