Fue un anónimo bibliotecario de provincias quien dio a Luis XIV una respuesta que ha hecho historia. Para demostrar sus conocimientos, el Rey Sol le dirigía las más abstrusas preguntas, a todas las cuales el pobre hombre respondía “No sé”. Molesto Luis, le preguntó: “Si no sabéis, ¿por qué os pagan?” Y dijo el bibliotecario: “Señor, me pagan por lo que sé. Si lo hicieran por lo que no sé, no habría dinero suficiente en vuestras arcas para pagarme”.