¿Quién lo iba a creer? A Cuatro días del día D, Casablanca… nuestra capital económica vive al ritmo y al compás de los últimos retoques de cara a Navidad.
Desde hace días en uno de sus mayores y más célebres mercados, Maarif, se vive la efervescencia.
Clientes y comerciantes parecen haberse preparado debida y “dignamente”.
Se vende de todo… se compra de todo, sobre todo los abetos (árboles de navidad), ostras de calidad (Walidia), capón… y hasta algunos prematuros « Papà Noel ».
Una carrera contra reloj para celebrar la fiesta de otros. Ya me gustaría ver a franceses o a españoles en Paris o en Madrid celebrar la Fiesta del cordero o la de la ruptura del ayuno. ¡Tu parle…! Como dicen los franceses.