
La ratificación y aplicación universal de la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes (UNCAT) es un objetivo crucial y debe ser apoyado y defendido por todos los Estados, afirmó, hoy viernes, el embajador y representante permanente de Marruecos en Viena, Azzeddine Farhane.
En su intervención en un acto celebrado al margen de la 31ª sesión de la Comisión de Prevención del Delito y Justicia Penal (CCPCJ), Farhane señaló que todos los Estados necesitan el apoyo de una cooperación internacional concreta con el fin de crear capacidades e intercambiar buenas prácticas útiles para el establecimiento de sistemas legislativos, institucionales y jurídicos nacionales eficaces y fiables. « El objetivo es garantizar la tolerancia cero de la tortura », subrayó.
Organizado bajo el lema « Lograr una reforma policial basada en los Derechos Humanos », el evento pretendía presentar una herramienta práctica para « mejorar la eficacia, la equidad y la transparencia en la labor policial, y reducir el riesgo de utilizar la tortura y otros malos tratos », señaló.
La herramienta es uno de los productos de la Iniciativa de la Convención contra la Tortura (CTI), que fue lanzada en Ginebra en 2014 por un pequeño grupo de países, concretamente Chile, Dinamarca y Marruecos, con el objetivo de lograr la ratificación universal de la UNCAT para 2024.