Jihane Jedidi es optica/periodista directora de comunidad infomarruecos
Foto: Jedidi Media
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En menos de dos años de pandemia y sus restricciones y sus temores, las ventas a domicilio que se habían disparado al comienzo han bajado un 50%.
Era una gran oportunidad de revolucionar el marketing marroquí. No fue así. Lo frenaron el fraude, la estafa y la selección de los peores artículos y productos, justamente los que o se hayan vendido durante meses.
La ausencia del cliente hizo creer a muchos comercios que podía ser la oportunidad de comercializar lo “incomerciable”.
Total, los hogares marroquíes han descubierto que nadie puede rascar tu piel mejor que sus dedos. De modo que la inmensa mayoría se trasladan para elegir los productos, verificar su calidad y asegurarse de la fecha de su fecha de caducidad.
Hubiera podido ser una fuente de rentabilidad y de lucro para el cliente y el vendedor. ¡Lástima!