Jihane Jedidi es optica/periodista directora de comunidad infomarruecos
Foto: Jedidi Media
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Mi amigo (y cliente) Amin es un escritor que se autodefine como “poeta frustrado”.
Ex funcionario, recién jubilado, el hombre es muy apreciado en el barrio Hassan y, según sus amigos, por todos los que lo conocen.
Esta mañana me dijo que “estoy pensando seriamente en dejar de escribir”.
¿Por qué?
Es que, hoy por hoy, para ser escritor no hace falta ninguna preparación ni competencia
¿Cómo?
Google se encarga de todo, desde la morfología hasta la ortografía, pasando por la lexicología y si tus baterías están vacías bastaría por decir a Google de qué quieres escribir, proporcionándole las líneas maestras y te obsequia con un artículo o una obra literaria
¿Tanto?
Mira, Jihane, servidor no lee, desde hace tiempo a los escritores modernos. No leo más que a los clásicos, de los que no conocían Google ni este había sido inventado aun
Amine no es el único que piensa así. Entre facilitar la tarea y desvalorarla, Google ayuda a muchos y frustra a otros.