Mneim Ben Chouayb: a causa de la falta de infraestructura para discapacitados
Mohamed M’Rini, periodista/escritor
Me acabo de enterar, con gran tristeza, que mi joven y querido amigo, Abdel Moneïm Ben Chouayb (foto), ha llegado desde muy lejos al Centro Cultural Ahmed Boukmakh para honrarme con su presencia, pero él no pudo llegar a la planta donde se desarrollaba el evento.
Permítanme presentarles, en resumen, a Abdel Moneïm que conocí en el centro de recepción de Dar Mouig’na cuando fui a trabajar con jóvenes sobre el uso del idioma francés, en forma de mesas redondas, invitando al diálogo y al intercambio.
Abdel Moneïm es, a pesar de su discapacidad, es un joven valiente con una fuerte voluntad de aprender, descubrir… Su participación en estas mesas fue rica y brillante.
Abdel Moneïm es un joven que canta, especialmente Samaa, escribe, dibuja, toca percusión, siempre sonriente y lleno de vida.
Le mantengo un excelente recuerdo y estoy profundamente molesto y decepcionado porque no pudo, por falta de ascensor y por falta de “solidaridad de brazos”, llegar a la sala.
Aprovecho esta oportunidad para hacer un sincero llamamiento al centro para abordar este grave problema que impide que los ciudadanos, con plenos derechos, accedan a cualquier espacio, incluidos los espacios culturales públicos.
Gracias mi querido Abdel Moneïm por tomarse la molestia de venir a verme… y verte de nuevo.
No tuvo éxito debido a la “estupidez humana” y siento una tristeza, sinceramente.
Texto traducido y comentado por M.Gharbi
Este joven había publicado una nota denunciando este extraño caso, en la cual indica que:
“Ingresé al gran y enorme centro cultural de la ciudad, “Ahmed Boukmakh”, para asistir a una ceremonia en honor a mi maestro Mohamed al-Marini, que Dios lo proteja, y ahora estoy siendo despedido, después de que no pude acceder a la sala donde se desarrollaba este gran evento, porque este último está en un piso superior que no puedo subir. ¡El centro, con su gran tamaño y su gran área, no tiene ascensor para personas con necesidades especiales!..
Estaba realmente sorprendido de cómo un centro con un costo de construcción de 52 millones de dírhams, que no dispone de un ascensor cuyo valor financiero no exceda a unos pocos dírhams, ¡Increíble y lamentable!..
Estaba muy emocionado de asistir a esta ceremonia, especialmente porque es una ceremonia que honra y homenajea a un hombre a quien aprecio y respeto mucho.