Jihane Jedidi es optica/periodista directora de comunidad infomarruecos
Foto: Jedidi Media
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La verdad es que siempre creí que Suecia era otra cosa… pero, afortunada o desgraciadamente en un momento u potro caen las máscaras.
¿Qué puede ganar un país, proclamándose enemigo de más de 1 500 millones de musulmanes?
Luego, a través del mundo, los amantes de la paz y de la lógica se preguntan por la filosofía de un país que respalda un perverso espectáculo con seguridad, publico y trasmisiones televisivas en directo, para quemar un libro sagrado.
A este ritmo Daesh exigiría mañana o pasado de Suecia su “derecho” a la libertad de expresión para vomitar sus barbaridades.
¿Qué diferencia? Es la intolerancia “democrática” … la libertad de fechorías… de delincuencia y de profanación de lo sagrado del prójimo.
¿Esto es libertad o democracia?
Desde ahora en adelante quien quiera profanar los valores morales o religiosos del otro, irá a la Suecia del terrorismo “democrático”.