Said Jedidi es embajador de la paz por el Circulo Universal de Embajadores de la paz (Suiza-Francia) periodista y escritor
No importa si otros no cumplieran con su deber ni que tuvieran cálculos diferentes a los nuestros aunque son nuestros.
Amin Aharchiun nos trajo fotografías de una manifestación de la vergüenza desde Barcelona y Mokhtar El Gharbi un militante de la primera hora y todo apunta hacia la posibilidad de que lo permanezca hasta la última encontró en ellas una profanación a su amor propio y a su país.
Todos conocemos a nuestros compatriotas afincados en España. Siempre se comportaron mejor cuando se trataba de defender la primera causa nacional. ¿Qué pasó?
En España el momento es grave, más graves las responsabilidades para asumir una nacionalidad que en España más que en cualquier otro país se debe asumir y se puede asumir.
¿Qué dirían los catalanes cuando vean aquella “manifestación”? Pero muchos otros hicieron y siguen haciendo sus agostos a expensas de esta sagrada causa sin desplegar la menor actividad o esfuerzo.
¿Cuántos organismos y cuantos ministerios en Marruecos se encargan de estos marroquíes del extranjero, entre ellos los de España?
¿Se encargan realmente? No haremos más que preguntarnos porque no tenemos respuestas y las necesitamos acuciantemente.
Sin embargo, lo único que debemos decir y repetir que si otros tienen gas y petróleo, nosotros en Marruecos, tenemos pueblo… la mejor riqueza.
